Y parece bien hecha, el mismo día de la inauguración soportó una intensa y fuerte lluvia, que no provocó su inundación. Muy al contrario de lo que ocurre con los colectores del distrito. Tampoco pareció, que en los apenas 5 minutos que el mal tiempo permitió jugar al fútbol, los chavales se resbalaran en exceso en la pista.
Pocos fuimos los vecinos que nos acercamos a ver el estreno. Particularmente me decidí en el último momento. Me había pasado por la zona en varias ocasiones durante estos meses y había hecho fotos de diferentes momentos de la construcción, y lógicamente quería ver el resultado definitivo.
En mi opinión resultado positivo, creo que muy positivo. La pista en líneas generales está en un estado óptimo, y esperemos que con el cuidado de todos, se pueda mantener así a lo largo del tiempo y no la veamos en breve llena de grafitis, cristales rotos de litronas y sin las redes.
Si poner atención a varios detalles a mejorar, como por ejemplo los focos que no están reglados, las entradas que no están hechas, y la explotación. Veremos cómo se va adecuando a la demanda. Pegas que se pueden solventar, solo hace falta tiempo y trabajo.
¿Algo más resaltable de una mañana de domingo gris y lluviosa?, tal vez la promesa de Erguido, refrendada por Inma, de la construcción de un parque infantil en el esquinazo que ha dejado la cancha multiusos y la insistencia en la petición de confianza hacia su labor.
Mire usted señor Erguido, o mejor, quitémosle hierro al asunto, al fin de cuentas cuando nos hemos visto siempre hemos podido hablar tranquilamente, cada uno desde su posición, pero tranquila y serenamente. Mira David la confianza es algo que uno se gana con honestidad, tiempo y trabajo… y desgraciadamente solo hace falta un segundo para perderla
Aunque es pronto, bien Laura, muy bien.